La Revolución Bolivariana continúa su avance indetenible en medio de la mayor agresión del imperialismo norteamericano en alianza con sus cipayos internos.
Durante un cuarto de siglo (1998-2024) han desarrollado múltiples formas de lucha, tanto encubiertas como públicas para tratar de detener el avance de nuestra revolución.
Debemos recordar entre otras acciones el paro cívico, paro petrolero, guarimbas 1 y 2, golpe de Estado y secuestro del Presidente Chávez, asesinato del Comandante Chávez y otros líderes del proceso, recordemos los casos emblemáticos de Rober Serra y y su compañera, Elíecer Otaiza, Rafael Durán, entre otros), operación Gedeón, la batalla de los puentes, drones para asesinar al alto mando de la revolución, incluyendo al Presidente Nicolás Maduro, devaluación monetaria inducida, emigración incitada, inflación y acaparamiento bestial, bachaquerismo corporativo, la «salida», medidas unilaterales e inmorales, infiltración en el alto gobierno por traidores a la Patria.
El imperialismo norteamericano ha sido el jefe de estas operaciones
Todas estas acciones son diseñadas desde el norte, la oposición recalcitrante no hace otra cosa que promoverlas y desarrollarlas, son simples sirvientes del imperialismo.
Es decir, no hemos tenido un día de paz y tranquilidad durante este largo tiempo.
La razón fundamental es que no hemos cedido ante las pretensiones imperialistas de ser una nación libre y soberana y además nos hemos convertido en un ejemplo para los pueblos del planeta que consideran que «otro mundo es posible».
La distribución de la riqueza que producen las trabajadoras y los trabajadores de la patria ha llegado a toda la población, sobre todo, la más olvidada y necesitada, que se refleja en la realidad diaria: Misión Robinson, Misión Rivas, Misión Barrio Adentro, Mercal, PDVAL, creación de 35 nuevas universidades, Misión Vivienda (4.7 millones de viviendas dignas), vialidad agrícola, Sistema Nacional de Orquestas, infraestructura turística, recreativa, cultural y deportiva son apenas parte de lo que hemos logrado impulsar desde la Revolución Bolivariana, antes con el Comandante Chávez y luego con nuestro Presidente obrero Nicolás Maduro.
La derecha solo busca el caos
En el pasado promovieron como discurso «La última cola», hoy promueven «aumento salarial» y «no más apagones», su agenda es generar el caos, la desesperanza, la rabia y frustración en nosotros, para tratar de confundir y manipular a nuestras electoras y electores como lo hicieron cuando obtuvieron mayoría en la Asamblea Nacional, quedando develado sus planes conspirativos, con su «gobierno interino», logrando un desfalco de nuestros recursos, vía robo y corrupción.
La Revolución Bolivariana tiene un proyecto
Debemos insistir en el debate de proyectos, de propuestas, las cuales nosotros tenemos y ellos carecen, solo plantean salir del presidente Maduro, y para ello se han buscado a un mamotreto de personaje made in USA, a quien ya colocan en las encuestas pagadas y financiadas por ellos, como el ganador, inclusive insistiendo que es el ganador, con un 62% y otros más atrevidos y falsos que lo colocan con 80%, otorgando solo un 20 % al Presidente Nicolás Maduro.
Su estrategia es colocarlo como ganador desde ya y luego gritar fraude, e iniciar de nuevo una política más agresiva de desestabilización y conflictividad como ya lo hicieron en el pasado, y que tantas vidas cobró esa agresión fascista.
La gran victoria nuestra es la estabilidad política que nos ha llevado a la estabilidad económica y social, la dinamización de la economía empieza a dar sus frutos, y este año será de mayor crecimiento y vendrán reivindicaciones dignas para la población más vulnerable como ha sido la orientación desde la llegada del Comandante Chávez y que continúa el Presidente Nicolás Maduro.
Las revolucionarias y revolucionarios marchamos unidos contra la guerra mediática
Por lo tanto, debemos garantizar su triunfo para continuar la senda trazada en el Plan de la Patria, marchar unidos en medio de las dificultades, sin divisiones. Todo aquel o aquella que trate de dividir la fuerza Bolivariana, simplemente le hace el juego al enemigo, aunque vengan con un discurso «radical» o «puro» o «más Chavistas que Chávez».
El enemigo profundizará la guerra psicológica y mediática, y nosotros/as debemos profundizar nuestra conciencia de clase, ir casa por casa a recalcar los logros obtenidos hasta hoy, y ver el horizonte socialista con esperanza y confianza en la Dirección política, militar policial de nuestra revolución, y obtener una contundente victoria el 28/07/2024 rumbo al 2030.
Centro de Estudios Socialista Jorge Rodríguez.
Valencia, Mayo 2024.
Fuerza24