Aquí les dejo un breve análisis de como veo la actual situación política que vive Venezuela.
Muchas veces la mentira baña a ciertos líderes de popularidad y hasta los llega a exhibir como el mesías. Pero cuando la realidad se impone, comienza la frustración y se genera el desaliento.
Y es precisamente contra el desaliento que nos tenemos que vacunar, siendo el mejor antídoto: la verdad. No importa que al principio cause dolor, pero tengan la seguridad que a la larga producirá un gran alivio.
Amigos hablemos con la verdad. La necesitamos para generar confianza.
P.D. Con estas palabras no pretendo promocionar a nadie (pues en este momento la vía electoral es una quimera). Lo que quiero significar es que sin organización jamás lograremos negros objetivos.
Entendamos que la política es cambiante y más en un país donde no existen instituciones autónomas. Dónde el régimen presiona o afloja de acuerdo a sus conveniencias. Debemos estar claros: toda esta diatriba de acusaciones contra sectores que «opositores» favorece a Nicolás Maduro.
El tema electoral debemos utilizarlo para acercarnos a los ciudadanos y exponer con argumentos nuestras razones para seguir luchando por Venezuela. Es con la palabra y el trabajo diario. Promover reuniones y hablar con los vecinos intercambiando ideas como si estuviéramos en un salón de clases.
Y eso es lo que he venido haciendo desde hace mucho tiempo, sin importar que estemos o no en «procesos electorales» nuestra misión es acercarnos a la gente para insistir en la construcción de una verdadera organización dónde la opinión ciudadana se haga respetar.
Esto no es asunto de un líder, sino de toda una colectividad. Por esa razón, los ciudadanos deben convertirse en apóstoles de la liberación. ¡Basta de seguir creyendo en falsos salvadores! A Venezuela la salvaremos entre todos.
ApretadoAbrazo
Pablo Aure
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