A pocas horas de finalizar 2024, cuando ya se puede trazar la raya para hacer el balance respectivo que permita corroborar, con más precisión, lo esperado para este año: la continuación del sostenido crecimiento económico de Venezuela, fenómeno comprobable hoy, fácilmente, por el fuerte movimiento comercial en las calles de todo el país con motivo de las festividades navideñas.
La economía venezolana cumple 14 trimestres consecutivos creciendo. La vicepresidenta ejecutiva de la República, Delcy Rodríguez, informó el 3 de diciembre que el Banco Central de Venezuela había calculado en 8,5 % el crecimiento del PIB para 2024. Así Venezuela se consolida como el país que más ha crece en la región, un logro heroico si se toman en cuenta al momento de evaluar –como debe ser- las condiciones de agresión económica y las dificultades externas para concretar el intercambio de bienes y servicios.
Una evaluación honesta no debe ignorar jamás que la economía venezolana ha sido blanco, por más de una década, de un ataque intenso y sostenido por parte del imperialismo estadounidense, es una guerra criminal para devastar nuestra economía y provocarle sufrimientos al pueblo con el objetivo de derrocar a la Revolución Bolivariana.
- Navidades alegres, victoria popular
- II Congreso de Comunalización Educativa realiza la UNEM Carabobo
- La «Ley basura» gringa será derrotada
Este ha sido un año muy exitoso para Venezuela, resultado de la acertada conducción del presidente Nicolás Maduro. En 2024 nuestro país tuvo el doble de ingresos con respecto a 2023, recursos que en su mayor parte se destinaron a la inversión social para atender al pueblo.
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) acaba de reconocer que Venezuela encabezó en 2024 el crecimiento económico en la región latinoamericana, aunque esa agencia se queda corta al anunciar un aumento de 6.2 % del PIB.
En el informe cepalino siguen República Dominicana 5,2 %, Paraguay 4,2 %, Costa Rica 4,1 %, Nicaragua 3,7 %, Honduras 3,6 %, Brasil 3,2 %, Perú y Uruguay 3,1 %, Bolivia 1,7 %, Ecuador 0,8 % y Argentina -3,2 %.
Además, la Cepal anuncia un panorama no muy halagador en la región latinoamericana al prever para año que termina un crecimiento de 2,2 %, considerándolo “una trayectoria de bajo crecimiento que ha redundado en una menor contribución de la región al crecimiento del PIB mundial en el mediano plazo”, panorama que tendería a proyectase mucho más sombrío en 2025.
Ante tal panorama Venezuela pareciera ser la excepción, si hurgamos más nuestro país creció en diversos sectores como: minería 21 %; construcción 24 %. También creció el comercio y la manufactura, pero destaca la mejora sustancial en la producción petrolera, uno de los pilares para la recuperación económica.
La recaudación hasta noviembre había crecido 120 %. 2024 es el año que ha tenido el mayor abastecimiento.
Todo lo indica, 2025 será mucho mejor, tendencia irreversible que será asegurada el 10 de enero cuando el Bravo Pueblo se juramente con el conductor de victorias, el presidente Nicolás Maduro , para seguir avanzando en paz y prosperidad.